Rosácea en la piel: en qué consiste, causas y cómo tratarla

Escrito por Elena Ramos

Publicado el

Actualizado el

La rosácea es una alteración cutánea que afecta el rostro, particularmente en nariz, mejillas, frente y barbilla. Se produce por la inflamación de los vasos sanguíneos.  Por lo general, sus síntomas suelen incluir ardor, rigidez e intolerancia a diversos cosméticos.

Esta patología comúnmente, afecta más a mujeres de 30 a 50 años de edad, por cambios significativos a nivel hormonal. Aunque también puede afectar a otras personas. Aquí te compartimos más información de esta enfermedad dermatológica, así como las alternativas más ideales para combatirla lo más pronto posible.

- Publicidad -

¿Cuáles son las causas de la rosácea?   

Si bien los factores de riesgo podrían variar de un caso a otro, las causas más comunes son las siguientes:

  • Factores genéticos, las personas con piel clara son más propensas a padecerla.
  • Factores hormonales, a causa del embarazo, pre-menopausia o menopausia.
  • Factores ambientales, debido a una sobreexposición a los rayos ultravioletas o a causa de variaciones climáticas.
  • Alteraciones gastrointestinales ocasionadas por la bacteria helicobacter pylori.
  • Presencia de ácaros en la piel.
  • Irregularidades en el funcionamiento de las venas faciales.
  • Consumo frecuente y excesivo de comida con alto contenido picante.
  • Altos niveles de estrés.

Cómo combatir la rosácea

Lo más importante es determinar el ocasionante de la rosácea en la piel, puesto si se debe a factores externos, es más sencillo tratarla. Pero si se trata de un factor fisiológico, primeramente se debe atacar el elemento desencadenante para contrarrestar sus efectos.

Hay diferentes opciones de tratamientos dermatológicos, cada uno de ellos se adapta a las condiciones y particularidades de quien padece esta alteración. Además, también se puede complementar el tratamiento médico con alternativas naturales.

En cuanto a las opciones médicas, destaca la electrocoagulación, indicada especialmente en casos intensos de rosáceas. Así como la aplicación de cosméticos creados particularmente para reducir esta alteración cutánea. Igualmente, cualquier tratamiento que se decida de la mano de un profesional, debe complementarse con la adaptación de ciertos hábitos saludables.

Por ejemplo, evitar alimentos o bebidas calientes y picantes, dormir las horas necesarias (8 horas diarias), evadir circunstancias de alto estrés emocional o ansiedad, mantenerse hidratado, conservar una higiene adecuada, entre otros.

La rosácea es una alteración que puede tratarse a tiempo para evitar mayores efectos. Por eso, es muy importante que el tratamiento médico sea complementado con un estilo de vida saludable que permita la reacción favorable del organismo.

 

 

- Publicidad -

 

¿Le resultó útil este artículo?
Artículos Relacionados