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El meteorismo intestinal es un trastorno del sistema digestivo, que la mayoría de personas han sufrido alguna vez. Se caracteriza por la presencia de gases en el sistema digestivo, produciendo una dilatación en el abdomen; al tiempo que pueden presentarse tensión, dolor y/o gorgoteo.
Aunque puede no ser grave en muchos casos, sí puede ser incómoda y hasta embarazosa, pues muchas veces se producen gases, que al expulsarlos, generan mal olor.
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Para tratar el Meteorismo Intestinal, el Dr. Stefano Erzegovesi, jefe del Centro de Trastornos Alimentarios del Hospital San Raffaele de Milán, recomiendo algunos consejos. Aquí hay 5 de ellos, según sus estudios.
5 consejos para contrarrestar el meteorismo intestinal
- Cocinar adecuadamente los alimentos
Hay alimentos como los cereales integrales y las legumbres, que deben cocinarse bien, preferiblemente, en una olla a presión. No es recomendable comerse al dente. - Vegetales en cortes finos
Al cortar los vegetales, debe hacerse en tozos pequeños y delgados; para personas con una situación más grave, deben incluso rallarse o triturarse. Cuando estos se pican en trozos grandes, pueden no ser bien digeridos. - Gradualidad y cantidad correcta de los alimentos
Cuando no se está acostumbrado a comer algo, especialmente las legumbres, deben añadirse a la dieta de forma gradual. Se puede iniciar añadiéndolas a otras preparaciones unas cuantas veces a la semana y luego ir aumentando.
De la misma forma que con los cereales y hortalizas integrales. También es importante comer en cantidades necesarias, mas no exageradas. - Masticar lo suficiente
Muchas veces los alimentos no son bien digeridos porque no se mastican lo suficiente antes de ser ingeridos. Los bocados deben masticarse al menos 30 segundos; de esta forma también disfrutar mejor sus sabores y texturas. - Uso de especias y hierbas.
El Dr. Erzegovesi asegura que: «Prácticamente todas las especias y hierbas tienen propiedades antifermentativas y antipurificantes, por lo que son enemigos jurados de los olores. Añádelos con moderación a tus platos (pequeñas cantidades son suficientes, de lo contrario el sabor del plato te matará), mejor crudos si son hierbas frescas, mejor cocinados si son hierbas o especias secas. En el caso de preferir experimentar el sabor puro y de los alimentos, puedes añadirlos a un té o infusión; por ejemplo, con algunos clavos, un trozo de anís estrellado o una cucharadita de semillas de hinojo en un litro de agua hirviendo para el té.
El Dr. añade también: «Evita mezclar las proteínas de origen animal y las legumbres, como judías con corteza de cerdo o habas frescas con salami. Lo ideal es acompañar las legumbres con granos enteros, como el arroz y las lentejas o la pasta y los garbanzos».
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