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El cáncer de ano es un tipo de cáncer poco común que se produce en el canal anal. El canal anal es un tubo corto situado al final del recto por el que salen las heces.
El cáncer anal puede causar signos y síntomas como sangrado rectal y dolor anal. La mayoría de las personas con cáncer de ano son tratadas con una combinación de quimioterapia y radioterapia. Aunque la combinación de tratamientos para el cáncer anal aumenta las posibilidades de curación, los tratamientos combinados también aumentan el riesgo de efectos secundarios.
Síntomas del cáncer de ano
Los signos y síntomas del cáncer de ano incluyen:
- Sangrado por el ano o el recto
- Dolor en la zona anal
- Una masa o crecimiento en el canal anal
- Picazón anal
Cuándo acudir al médico
Hable con su médico sobre cualquier signo o síntoma que le moleste, especialmente si tiene factores que aumentan el riesgo de cáncer anal.
Principales causas del cáncer de ano
El cáncer de ano se produce cuando una mutación genética convierte las células normales y sanas en células anormales. Las células sanas crecen y se multiplican a un ritmo determinado y acaban muriendo. Las células anormales crecen y se multiplican de forma descontrolada, pero no mueren. Las células anormales que se acumulan forman una masa (tumor). Las células cancerosas invaden los tejidos vecinos y pueden desprenderse de un tumor inicial y extenderse a otra parte del cuerpo (metástasis). El cáncer anal está estrechamente relacionado con una infección de transmisión sexual llamada virus del papiloma humano (VPH). En la mayoría de los cánceres anales se detectan rastros del VPH. Se cree que el VPH es la causa más común del cáncer de ano.
Factores de riesgo del cáncer de ano
Los médicos han descubierto que hay varios factores que aumentan el riesgo de padecer cáncer anal, entre ellos:
Edad avanzada
La mayoría de los casos de cáncer de ano se dan en personas de 50 años o más.
Muchas parejas sexuales
Las personas que tienen muchas parejas sexuales a lo largo de su vida tienen un mayor riesgo de padecer cáncer anal.
Sexo anal
Las personas que practican sexo anal receptivo tienen un mayor riesgo de padecer cáncer anal.
Fumar
Fumar cigarrillos puede aumentar el riesgo de cáncer anal.
Antecedentes de cáncer
Las personas que han padecido cáncer de cuello de útero, vulva o vagina tienen un mayor riesgo de padecer cáncer anal.
Virus del papiloma humano (VPH)
La infección por el VPH aumenta el riesgo de varios tipos de cáncer, como el cáncer anal y el cáncer de cuello de útero. La infección por VPH es una infección de transmisión sexual que también puede causar verrugas genitales.
Medicamentos o condiciones que suprimen su sistema inmunológico
Las personas que toman fármacos para suprimir su sistema inmunitario (fármacos inmunosupresores), incluidas las personas que han recibido trasplantes de órganos, pueden tener un mayor riesgo de padecer cáncer anal. El VIH, el virus que causa el SIDA, suprime el sistema inmunitario y aumenta el riesgo de cáncer anal.
Complicaciones del cáncer de ano
El cáncer de ano rara vez se extiende (hace metástasis) a partes distantes del cuerpo. Sólo un pequeño porcentaje de los tumores se han extendido, pero los que lo hacen son especialmente difíciles de tratar. Las metástasis del cáncer de ano suelen extenderse al hígado y a los pulmones.
Prevención del cáncer de ano
No existe una forma segura de prevenir el cáncer anal. Para reducir el riesgo de cáncer anal:
Practicar el sexo seguro
Practicar sexo seguro puede ayudar a prevenir el VPH y el VIH, dos virus de transmisión sexual que pueden aumentar el riesgo de cáncer anal. Si decides tener sexo anal, utiliza preservativos.
Vacunarse contra el VPH
Existe una vacuna que protege contra la infección del VPH. Se recomienda para niños y niñas adolescentes, pero también puede administrarse a adultos.
Dejar de fumar
El tabaquismo aumenta el riesgo de cáncer anal. No empieces a fumar. Deje de hacerlo si actualmente fuma.
Diagnóstico
Las pruebas y procedimientos utilizados para diagnosticar el cáncer de ano son los siguientes:
– Examen del canal anal y del recto para detectar anomalías. Durante un examen rectal digital, el médico introduce un dedo enguantado y lubricado en el recto. Buscará cualquier anomalía, como crecimientos.
– Inspección visual del canal anal y del recto. El médico puede utilizar un tubo corto e iluminado (anoscopio) para inspeccionar el canal anal y el recto en busca de cualquier anomalía.
– Imágenes de ondas sonoras (ultrasonido) de su canal anal. Para crear una imagen del canal anal, el médico introduce una sonda, similar a un termómetro grueso, en el canal anal y el recto. La sonda emite ondas sonoras de alta energía, denominadas ondas de ultrasonido, que rebotan en los tejidos y órganos del cuerpo para crear una imagen. El médico evalúa la imagen para buscar cualquier anomalía.
– Toma de una muestra de tejido para su análisis en el laboratorio. Si el médico encuentra zonas inusuales, puede tomar pequeñas muestras del tejido afectado (biopsia) y enviarlas a un laboratorio para su análisis. Examinando las células al microscopio, los médicos pueden determinar si son cancerosas.
Determinación de la extensión del cáncer
Una vez que se confirme que tiene cáncer de ano, el médico puede recomendar más pruebas para ver si el cáncer se ha extendido a los ganglios linfáticos o a otras partes del cuerpo.
Estas pruebas pueden incluir:
- una tomografía computarizada (TC)
- Resonancia magnética (MRI)
- Tomografía por emisión de positrones (PET)
El médico utiliza la información de las pruebas para determinar el estado del cáncer. Los estados del cáncer anal se indican con números romanos que van del 0 al IV, siendo los más bajos los que indican que el cáncer es pequeño y se limita al ano. En el estado IV, el cáncer se ha extendido a zonas distantes del cuerpo.
El sistema de estadificación del cáncer sigue evolucionando y haciéndose más complejo a medida que los médicos mejoran el diagnóstico y el tratamiento del cáncer. Su médico utiliza el estado del cáncer para seleccionar los tratamientos adecuados para usted.
Tratamiento
El tratamiento que reciba para el cáncer de ano depende del estado de su cáncer, de su salud general y de sus propias preferencias.
Quimioterapia y radioterapia combinadas
Los médicos suelen tratar el cáncer anal con una combinación de quimioterapia y radioterapia. Juntos, estos dos tratamientos se refuerzan mutuamente y mejoran las posibilidades de curación.
Quimioterapia
Los medicamentos de quimioterapia se inyectan en una vena o se toman en forma de comprimidos. Las sustancias químicas viajan por todo el cuerpo y matan las células de crecimiento rápido, como las cancerosas. Por desgracia, también dañan las células sanas de crecimiento rápido, incluidas las del tracto gastrointestinal y los folículos pilosos. Esto provoca efectos secundarios como náuseas, vómitos y pérdida de cabello.
Radioterapia
La radioterapia utiliza haces de alta potencia, como los rayos X y los protones, para eliminar las células cancerosas. Durante la radioterapia, usted se sienta en una mesa y una gran máquina se mueve a su alrededor, dirigiendo haces de radiación a zonas específicas de su cuerpo para atacar el cáncer. La radiación puede dañar el tejido sano cerca de donde se dirigen los haces. Los efectos secundarios pueden ser el enrojecimiento de la piel y las llagas en el ano y alrededor de él, y el endurecimiento y estrechamiento del canal anal. La radioterapia para el cáncer de ano suele durar entre cinco y seis semanas. La quimioterapia suele administrarse en la primera y la quinta semana. Su médico adaptará su programa de tratamiento en función de las características de su cáncer y de su estado de salud general.
Aunque la combinación de quimioterapia y radioterapia aumenta la eficacia de ambos tratamientos, también hace más probables los efectos secundarios. Hable con su médico sobre los efectos secundarios que debe esperar.
Cirugía
Los médicos suelen utilizar diferentes procedimientos para extirpar el cáncer anal en función del estado en que se encuentre:
Cirugía para extirpar los cánceres anales tempranos. Los cánceres de ano muy pequeños pueden extirparse mediante cirugía. Durante este procedimiento, el cirujano extirpa el tumor y una pequeña cantidad de tejido sano que lo rodea. Debido a que los tumores son pequeños, los cánceres en fase inicial a veces pueden extirparse sin dañar los músculos del esfínter anal que rodean el canal anal. Los músculos del esfínter anal controlan el movimiento del intestino, por lo que los médicos tratan de mantener estos músculos intactos.
Dependiendo de su cáncer, su médico también puede recomendar quimioterapia y radioterapia después de la operación.
Cirugía para el cáncer que no ha respondido a otros tratamientos. Si el cáncer no ha respondido a la quimioterapia y la radioterapia, el médico puede recomendar una operación más extensa denominada resección abdominoperineal, a veces llamada resección AP. En este procedimiento, el cirujano extirpa el canal anal, el recto y parte del colon. Luego, el cirujano fija la parte restante del colon a una abertura (estoma) en el abdomen a través de la cual los desechos saldrán del cuerpo y se recogerán en una bolsa de colostomía.
Inmunoterapia
La inmunoterapia utiliza su sistema inmunitario para combatir el cáncer. Es posible que el sistema inmunitario de su cuerpo no ataque al cáncer porque las células cancerosas producen proteínas que las hacen indetectables para las células del sistema inmunitario. La inmunoterapia actúa interfiriendo en este proceso. Los tratamientos de inmunoterapia suelen reservarse para personas con cáncer anal avanzado.
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