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Los cálculos renales son pequeños depósitos duros que se forman en los riñones. Se desarrollan cuando hay una disminución de la orina o un aumento de ciertas sustancias, como los minerales y las sales. Los cambios en la dieta pueden ayudar a prevenirlos.
Los cálculos renales pueden causar un dolor extremo. En este artículo, describimos algunas de las elecciones alimentarias que una persona puede hacer para reducir el riesgo de desarrollar cálculos renales, incluyendo los alimentos que debe comer y evitar.
¿En qué consiste la dieta para los cálculos renales?
Beber mucha agua es uno de los aspectos de la dieta para prevenir los cálculos renales. Las personas que quieran evitar la aparición de cálculos renales por primera vez o reducir el riesgo de recurrencia si ya han tenido cálculos deben seguir estos pasos clave:
- Beber mucha agua
- Limitar el consumo de sal y de proteínas animales
- Limitar los alimentos ricos en oxalatos.
- Consumir suficiente calcio.
Seguir la dieta DASH
No existe una dieta única para todos los tipos de cálculos renales, ya que pueden formarse debido a la acumulación de varios minerales diferentes en el organismo. Sin embargo, muchos dietistas y médicos especialistas en riñón, o nefrólogos, recomiendan la dieta DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension) para las personas con cálculos renales.
Se ha demostrado que esta dieta reduce el riesgo de formación de cálculos renales y mejora otros elementos de la salud en general, como la disminución de la presión arterial y la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y cáncer.
La dieta DASH anima a comer verduras, frutas, cereales integrales y productos lácteos bajos en grasa. La dieta también sugiere limitar la sal, el azúcar y la carne roja.
Sin embargo, los cambios en la dieta son principalmente para las personas con riesgo de padecer los siguientes tipos de cálculos renales:
- cálculos de oxalato de calcio
- cálculos de fosfato de calcio
- cálculos de ácido úrico
- cálculos de cistina
Se recomienda consultar a su médico para determinar qué tipo de cálculo renal tiene, si es que lo tiene, para poder tomar decisiones dietéticas eficaces. Reducir el consumo de sodio en la dieta en lugar de reducir el consumo de calcio.
Alimentos que debe comer
Dado que los cálculos renales varían en cuanto a los minerales que contienen, las recomendaciones dietéticas también varían. He aquí algunas sugerencias sobre qué incluir en la dieta para prevenir los cálculos renales.
Agua
Añadir agua a la dieta puede ayudar a prevenir los cálculos renales, ya que suelen estar causados por la deshidratación. Intenta beber de 6 a 8 vasos de agua al día.
Está bien beber otros líquidos además de agua. Sin embargo, es importante comprobar el contenido de sodio de la bebida, ya que muchas de ellas tienen un alto contenido de sal. También es mejor evitar las bebidas especialmente dulces, como los zumos azucarados y los refrescos.
Alimentos ricos en calcio y oxalato
Una persona debe incluir alimentos ricos en calcio, especialmente si come muchos alimentos con alto contenido de oxalato, como las espinacas. Una dieta baja en calcio aumenta el riesgo de desarrollar cálculos renales. El calcio y el oxalato se unen en los intestinos, impidiendo la formación de cálculos.
Algunos alimentos que se pueden incluir son:
- productos lácteos bajos en grasa o sin grasa
- Frijoles
- Verduras ricas en calcio, como el brócoli
- Algas marinas
Frutas y verduras
Las frutas y verduras son una parte esencial de cualquier dieta. Aumentar el número de verduras en la dieta puede ayudar a prevenir la formación de cálculos. Las frutas pueden ser secas, congeladas o frescas. Las frutas con alto contenido en ácido cítrico, como las naranjas y los limones, también han demostrado un efecto positivo en la prevención de los cálculos renales, según una revisión de estudios de 2014. Las personas deben familiarizarse con las frutas y verduras con alto contenido de oxalato, incluidas las espinacas, y tratar de limitar la cantidad en la dieta. También se pueden combinar con alimentos que contengan grandes cantidades de calcio.
Proteínas de origen vegetal
Es seguro comer pequeñas cantidades de proteínas animales. Sin embargo, un exceso de proteínas animales puede aumentar el riesgo de cálculos renales. Los dietistas animan a incluir fuentes de proteínas de origen vegetal en la dieta para los cálculos renales. Algunos ejemplos son las judías, los guisantes y las lentejas.
Alimentos que hay que limitar o evitar
Los alimentos que se deben limitar dependen del tipo de cálculo que se esté desarrollando en el cuerpo de la persona.
Los alimentos que deben limitarse son:
Alimentos con alto contenido en sodio, incluidos los alimentos procesados y envasados y la comida rápida.
Ciertas proteínas animales, como los huevos, el pescado, el cerdo y la carne de vacuno.
Si una persona ha tenido cálculos de oxalato de calcio en el pasado, es posible que quiera limitar los siguientes alimentos, que tienen un alto contenido de oxalato y pueden aumentar el riesgo de recurrencia:
- nueces
- cacahuetes
- espinacas
- salvado de trigo
- ruibarbo
Cada persona es diferente, y las necesidades individuales y los requisitos dietéticos varían.
El aspecto más importante de la gestión de la dieta en la prevención de los cálculos renales recurrentes es consultar a un médico o dietista. Podrán identificar el tipo de cálculo renal que se está desarrollando y las formas de ralentizar o detener su desarrollo.
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