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Las semillas de calabaza tienen muchos nutrientes, desde el magnesio y el manganeso hasta el cobre, las proteínas y el zinc, realmente son bombas nutricionales en miniatura. También contienen compuestos de plantas, fitoesteroles y antioxidantes que eliminan los radicales libres, lo que puede mejorar su salud. Debido a que son semillas con alto contenido de fibra, pueden aumentar su consumo de fibra hasta la cantidad ideal de 50 gramos por cada 1000 calorías consumidas.
Las semillas de calabaza son muy fáciles de conservar y llevar. No es necesario mantenerlas en un lugar fresco. Así que son un bocadillo muy práctico para llevar a cualquier parte y se pueden comer a cualquier hora del día.
Beneficios antiinflamatorios
Se ha descubierto que el aceite de semilla de calabaza tiene efectos antiinflamatorios. Es particularmente adecuado para el alivio del dolor articular relacionado con la artritis.
El magnesio para la salud del corazón
Un cuarto de taza de semillas de calabaza contiene casi la mitad de la ingesta diaria recomendada de magnesio, que interviene en muchas funciones fisiológicas vitales. Estos incluyen la producción de ATP (trifosfato de adenosina, la molécula que proporciona energía al cuerpo), la síntesis de ARN y ADN, la acción de bombeo del corazón, la formación adecuada de huesos y dientes, la relajación de los vasos sanguíneos y el buen tránsito intestinal.
Se ha demostrado que el magnesio promueve una presión sanguínea saludable y ayuda a prevenir ataques cardíacos, apoplejías y derrames cerebrales, pero se estima que el 80% de los estadounidenses son deficientes en esta importante sal mineral.
Triptófano para un sueño reparador
Las semillas de calabaza son una importante fuente de triptófano, un aminoácido (o bloque constructor de proteínas) que el cuerpo convierte en serotonina, que a su vez se convierte en melatonina, la «hormona del sueño».
Comer semillas de calabaza unas horas antes de acostarse, junto con un carbohidrato como una baya, puede ser particularmente beneficioso y proporcionar a su cuerpo el triptófano necesario para la producción de melatonina y serotonina, que promueven un sueño reparador.
El zinc para aumentar la inmunidad
Las semillas de calabaza son una rica fuente de zinc (30 gramos contienen más de 2 mg de esta beneficiosa sal mineral). El zinc es importante para el cuerpo en muchos sentidos, incluyendo la inmunidad, el crecimiento y la división celular, el sueño, el humor, el sentido del gusto y del olfato, la salud de los ojos y de la piel, la regulación de la insulina y la función sexual masculina. Muchas personas carecen de zinc por una variedad de razones, incluyendo los suelos agotados de zinc, los efectos secundarios de los medicamentos, las dietas vegetarianas y otras dietas ricas en granos. Esta deficiencia está asociada, entre otras cosas, a casos más frecuentes de resfriados y gripe, fatiga crónica, depresión, acné, bebés con bajo peso al nacer, problemas de aprendizaje y bajo rendimiento escolar en los niños.
Salud del corazón y del hígado
Las semillas de calabaza, ricas en grasas buenas, antioxidantes y fibra, pueden ser beneficiosas para la salud del corazón y el hígado, especialmente cuando se mezclan con semillas de lino.
Ácidos grasos omega-3 de origen vegetal
Las nueces y semillas crudas, especialmente las semillas de calabaza, se encuentran entre las mejores fuentes de omega-3 (ácido alfa-linolénico o ALA) de origen vegetal. Todos necesitamos ALA, pero el cuerpo debe convertirlo en los mucho más importantes ácidos grasos omega-3 EPA y DHA – por una enzima que se debilita en la mayoría de las personas por los altos niveles de insulina.
Beneficios para las mujeres postmenopáusicas
El aceite de semilla de calabaza es rico en fitoestrógenos naturales y los estudios sugieren que puede provocar un aumento significativo del «HDL» o colesterol bueno, así como una disminución de la presión arterial, los sofocos, los dolores de cabeza, el dolor de las articulaciones y otros síntomas de la menopausia en las mujeres.
Salud de la próstata
Las semillas de calabaza se han considerado durante mucho tiempo un importante alimento natural para la salud humana. Ello se debe en parte a su alto contenido de zinc, que es importante para la salud de la próstata (la zona del cuerpo en la que se encuentra en mayores concentraciones), y también porque los aceites y extractos de la semilla de calabaza pueden desempeñar un papel en el tratamiento de la hiperplasia benigna de la próstata. Las investigaciones sugieren que tanto el aceite como las semillas de calabaza pueden ser particularmente beneficiosos para la salud de la próstata.
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