La bardana, una planta medicinal más allá de las apariencias

Escrito por Elena Ramos

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La bardana, científicamente llamada Articum, es una planta de hojas grandes que tiene una vida útil de dos años. Sus partes aéreas pueden alcanzar hasta 2 m y sus raíces pueden excavar hasta 50 cm bajo tierra. Produce flores púrpuras o moradas, agrupadas en racimos por los capullos de las flores. Originaria de Europa y Asia, se encuentra hasta 1.800 m sobre el nivel del mar. Sin embargo, crece particularmente en los bordes de los caminos y en zonas donde hay mucha vegetación, pero también en tierras recién cultivadas. La fitoterapia la aprecia especialmente por su contenido de nitrato de potasio, inulina, polinos y arctigenina.

¿En qué caso puede indicarse?

Se puede usar internamente, pero también externamente.

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Para uso interno, proporciona una acción depurativa. Su capacidad para estimular las funciones del hígado y los riñones le permite, entre otras cosas, preservar la salud de la piel. Recuerda que los trastornos de la piel y los órganos digestivos tienen un vínculo. Cuando los riñones y los hígados están demasiado agobiados, aparece el acné, por ejemplo. Además, aún para uso interno, es capaz de reducir la artrosis reumática. Esta planta tiene, en efecto, una acción antiinflamatoria.

Para uso externo, la fitoterapia lo utiliza para contrarrestar las condiciones de la piel (acné, eczema, psoriasis, micosis…). También se puede considerar su uso en caso de mordeduras de insectos. También se puede prescribir bardana para remediar la pérdida de cabello.

¿En qué formas se puede utilizar en la fitoterapia?

En la medicina oriental, se utiliza especialmente en forma de té de hierbas. Sin embargo, también puede utilizarse como cataplasma; consumir como cápsula; beber como tintura madre; aplicar como extracto.

Uso y dosificación de la bardana

El té de hierbas puede ser preparado con sus hojas y raíces. Para lograr los resultados deseados, siga la siguiente dosis. Tomar de 3 a 6 g por taza y hervirla en un ½ l de agua. Bebe tres veces al día. Estos preparados pueden utilizarse tanto interna como externamente. Para esto último, simplemente lávate con él.

Hay cremas basadas en su extracto. Se puede utilizar en el cuidado de las afecciones de la piel (acné, eccema, hongos…).

Para el transformado en una cápsula, lo ideal sería pedir una receta médica.

La cataplasma puede ser prescrita si la persona desarrolla eccema o psoriasis, por ejemplo. Aplique las hojas y raíces aplastadas y calentadas a la zona afectada.

La tintura madre puede ser prescrita para el acné y las afecciones de la piel. Para ello, tome de 1,6 a 2,4 g de tintura madre en un vaso de agua. Bébalo tres veces al día para ayudar a los riñones y al hígado a funcionar.

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¿Cuáles son las contraindicaciones que hay que recordar antes de usarlo?

Las personas que sufren de cálculos urinarios no deben usarla. De hecho, ciertos ingredientes activos de la planta pueden agravar la situación al obstruir el tracto urinario. Esto entonces aumentará la sensación de dolor.

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