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En la actualidad, la importancia de la ingesta de potasio en nuestro cuerpo está muy subestimada. Cuando este mineral, clasificado como electrolito, se disuelve en el agua, produce iones de carga positiva, una propiedad especial que le permite conducir la electricidad, lo que es importante para muchos procesos en todo el cuerpo.
Una dieta rica en potasio está vinculada a muchos beneficios poderosos para la salud. Puede ayudar a reducir la presión arterial y la retención de agua, proteger contra el riesgo de accidente cerebrovascular y ayudar a prevenir la osteoporosis y los cálculos renales.
El potasio es necesario para el funcionamiento normal de todas las células. Regula el latido del corazón, asegura el buen funcionamiento de los músculos y los nervios y es vital para sintetizar proteínas y metabolizar los carbohidratos.
Reclutamiento adecuado
Hace miles de años, cuando los humanos comían cosechas y cazaban, el potasio era abundante en la dieta, mientras que el sodio era escaso. La llamada dieta paleolítica proporcionaba unas 16 veces más potasio que el sodio.
Hoy en día, muchas personas reciben sólo la mitad de la cantidad recomendada de potasio en su dieta. La dieta occidental promedio contiene aproximadamente el doble de sodio que el potasio, debido a la preponderancia de la sal en los alimentos procesados o preparados, sin mencionar la falta de potasio en esos alimentos.
Se cree que este desequilibrio, a diferencia de la evolución de los seres humanos, contribuye significativamente a la hipertensión, que afecta a uno de cada tres adultos.
La recomendación para un consumo adecuado de potasio es de 4,700 mg. Los plátanos suelen promocionarse como una buena fuente de potasio, pero otras frutas, como los albaricoques, las ciruelas y el zumo de naranja, y las verduras como la calabaza y las patatas, también contienen este nutriente que a menudo se pasa por alto.
Se ha demostrado que las dietas que enfatizan un aumento en el consumo de potasio pueden ayudar a mantener la presión arterial en un rango saludable.
Menor incidencia
Un estudio, que evaluó el impacto del potasio en la presión arterial, comparó tres regímenes: la dieta estándar, con un contenido promedio de 3.5 porciones diarias de frutas y verduras, equivalente a 1,700 mg de potasio por día; una dieta rica en frutas y verduras, que incluía un promedio de 8.5 porciones diarias, que proporcionaban 4,100 mg de potasio por día; y una dieta «combinada» que incluía las mismas 8.5 porciones de frutas y verduras, además de productos lácteos bajos en grasa, bajos en azúcar y carne roja.
En las personas con presión arterial normal, la dieta rica en frutas y verduras redujo la presión arterial en 2.8 mm Hg (en la lectura sistólica) y 1.1 mm Hg (en la lectura diastólica) más que la dieta estándar.
La dieta combinada redujo la presión arterial en 5.5 mm Hg y 3.0 mm Hg más que la dieta estándar. En las personas con hipertensión, la dieta combinada ha reducido aún más la presión arterial, hasta 11 mm Hg en la presión sistólica y 5,5 mm Hg en la presión diastólica.
La hipertensión es un factor de riesgo importante para los accidentes cerebrovasculares, por lo que no es sorprendente que los niveles adecuados de potasio estén asociados con una menor incidencia de accidentes cerebrovasculares.
Un estudio prospectivo que dio seguimiento a más de 43,000 hombres en ocho años encontró que aquellos que consumieron las cantidades más altas de potasio en la dieta (una mediana de 4,300 mg por día) fueron 38% menos propensos a tener una apoplejía que aquellos cuya mediana de consumo no excedió los 2,400 mg por día.
La recomendación general es simple: trate de comer alimentos más ricos en potasio, especialmente frutas y verduras. En este sentido, hay una advertencia: nunca tomar suplementos de potasio sin supervisión médica, ya que esto puede causar niveles demasiado altos de potasio en la sangre que son peligrosos.
