Un estudio desarrollado por científicos de la Escuela de Ciencias de la universidad de Warwick descubrió lo que podría ser un remedio medieval que activaría antimicrobianos naturales; estos serían capaces de combatir muchas de las infecciones actuales. El estudio fue publicado en la revista ‘Scientific Reports’ por los investigadores Freya Harrison, Jessica Furner-Pardoe y Blessing Anonye.
Estos investigadores han reconstruido y mejorado un remedio medieval que data de hace 1000 años. Este remedio contiene ajo, cebolla, sales biliares y vino; conocido en ese entonces como “colirio de calvos” usado para tratar el estreptococo. El estudio también afirma que los resultados obtenidos por el remedio han sido sorprendentemente gratos; los análisis muestran una importante actividad antibacteriana y muy pocos daños colaterales a las células humanas.
El estudio
Los investigadores descubrieron mediante técnicas de cultivo celular, que el remedio es eficaz contra patógenos Gram negativos y Gram positivos. Luego, también probaron el remedio en un ecosistema microbiano organizado, conocido como biopelículas; allí resultó ser efectivo contra algunos patógenos comunes como: Acinetobacter baumanii (causante de las infecciones en heridas); Stenotrophomonas maltophilia (causante de infecciones respiratorias en humanos); Staphylococcus aureus (causa común de infecciones cutáneas y respiratorias); Staphylococcus epidermidis (causa de infecciones en heridas quirúrgicas y bacteriemia en pacientes inmunocomprometidos) y Streptococcus pyogenes (causa de faringitis, amigdalitis y escarlatina).
Todas estas baterías pueden estar presentes en biopelículas que infectan las ulceras de los pacientes diabéticos, que a menudo son resistentes a tratamientos con antibióticos, por lo que podría ser una solución eficaz contra estos pacientes.
Cabe aclarar, que el remedio requiere la combinación de todos los ingredientes como actuadores para ser eficaz, tal como lo resalta Harrison “Hemos demostrado que un remedio medieval basado en la combinación de cebolla, ajo, vino y bilis puede destruir muchas de las bacterias que causan las infecciones comunes. Además, al realizar experimentos sobre ratones y células humanas hemos descubierto que no causa daños severos, por lo que podríamos desarrollar pronto un tratamiento antibacteriano seguro y efecto a partir de este estudio”.
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