Dolor, inflamación: 5 plantas con efectos antidolor y antiinflamatorios

Escrito por Elena Ramos

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La inflamación es una respuesta natural del organismo a una agresión, como una enfermedad, una infección o una lesión, y puede manifestarse con dolor, calor, enrojecimiento e hinchazón en la zona afectada.

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La inflamación aguda suele ser muy útil para alertar al cuerpo del peligro, pero la inflamación crónica es perjudicial para el organismo. Algunas plantas ricas en antioxidantes (por ejemplo, los flavonoides) pueden ayudar a combatir la inflamación crónica.

Jengibre

El jengibre (Zingiber officinalis) es una planta de la familia de las zingiberáceas. Esta planta contiene compuestos con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes como los gingeroles, paradoles y shogaoles.

Por eso es especialmente eficaz para aliviar el dolor causado por la artritis y otros reumatismos inflamatorios. Para aprovechar al máximo las propiedades del jengibre, se recomienda comerlo fresco. El consumo diario de jengibre no provoca ningún efecto secundario en particular.

El falso pimiento

El falso pimiento o baya rosa (Schinus terebinthifolius) procede de un árbol originario de Perú. Los indios sudamericanos la utilizan desde hace mucho tiempo por sus virtudes naturales. Hoy en día, es conocida por sus beneficios musculares y articulares.

Disponible en forma de aceite esencial, el falso pimiento se destina principalmente a un uso externo. Mezclado con un poco de aceite vegetal, suele utilizarse como aceite de masaje para tratar los dolores relacionados con la artritis y la artrosis. También es eficaz para tratar los dolores y cualquier otro traumatismo articular.

Té verde

El té verde (Camellia sinensis) debe sus propiedades antiinflamatorias a su riqueza en polifenoles y, en particular, en catequina, una sustancia con un poder antioxidante aproximadamente 200 veces superior al de la vitamina E. Varios estudios han demostrado que el té verde es un excelente analgésico y antiinflamatorio.

Es especialmente eficaz en el tratamiento de enfermedades inflamatorias, sobre todo para reducir y detener la degradación del cartílago que provoca este tipo de enfermedades. Para aprovechar al máximo el té verde, es aconsejable dejarlo reposar de 3 a 5 minutos. Bebe esta infusión una o varias veces al día.

Cúrcuma

La cúrcuma (Curcuma aromatica, Curcuma longa) se utiliza desde hace tiempo en la India y China para tratar enfermedades inflamatorias crónicas. Los ensayos in vitro y en animales han demostrado que esta especia es eficaz en el tratamiento de la pancreatitis, la artritis reumatoide y la colitis ulcerosa.

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Para las personas con osteoartritis, el tratamiento con cúrcuma puede lograr efectos comparables a los de los medicamentos antiinflamatorios convencionales, como el ibuprofeno. Los extractos estandarizados de esta planta medicinal también pueden reducir los síntomas del síndrome del intestino irritable y, por tanto, mejorar el bienestar de las personas que lo padecen. El consumo de cúrcuma también ayuda a prevenir la aparición de enfermedades inflamatorias del hígado y el intestino, como la obstrucción de las vías biliares o la hepatitis.

Aceite de oliva

El aceite de oliva es rico en oleocantal, un compuesto que tiene las mismas propiedades terapéuticas que el ibuprofeno, un medicamento antiinflamatorio de uso frecuente.

Una cucharada de aceite de oliva es aproximadamente el 10% de la dosis necesaria para combatir el dolor. A largo plazo, el consumo regular de aceite de oliva ayuda a reducir el riesgo de desarrollar muchos tipos de cáncer, incluida la enfermedad de Alzheimer.

Extra

El cilantro (Coriandrum sativum), en forma de frutos o semillas, también tiene un efecto antiinflamatorio.

El aceite de coco (Cocos nucifera) también tiene un efecto antiinflamatorio, especialmente indicado para enfermedades de la piel como el acné.

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