Guía para comer sano

Escrito por Elena Ramos

Publicado el

Actualizado el

Guía para comer sano :Adoptar una dieta saludable trae a tu vida muchos beneficios, desde el hecho de aumentar tu energía diaria, hasta conseguir el fortalecimiento de tus órganos vitales. Para esto, es importante que incorpores poco a poco hábitos saludables que te permitan convertir la comida sana en parte de tu rutina, y que no lo veas solo como una obligación.

De ese modo, podrás desarrollar un estilo de vida saludable que querrás mantener durante el tiempo. Pues lo verás como una nueva forma de mantenerte sano, fuerte y lleno de vitalidad.

- Publicidad -

Por esa razón, queremos brindarte una guía sencilla para que comiences a asumir hábitos saludables basados en la alimentación.

Guía para iniciar una alimentación sana

Si deseas transformar la forma en la que te alimentas y reemplazarla por hábitos más saludables, da un vistazo a los siguientes consejos:

[sta_anchor id=»link1″]Equilibra tus platos de comida[/sta_anchor]

Introducir diferentes grupos alimenticios te permitirá aprovechar todos los nutrientes que estos tienen para brindarte. Así que procura equilibrar tus platos, integra porciones de vegetales en un 50%, también proteínas en un 25% y carbohidratos en un 25%. Y acompaña cada plato de comida con un vaso de agua.

[sta_anchor id=»link2″]Escoge alimentos bajos en grasas saturadas[/sta_anchor]

Tu organismo necesita de grasas y calorías buenas para su buen funcionamiento, no debes eliminarlas de tu dieta. Solo debes comer platos adecuados que permitan fortalecer tu organismo. Lo más ideal es consumir alimentos bajos en grasas saturadas, es decir, frutos secos, aguacate, salmón, entre otros.

[sta_anchor id=»link3″]Limita el consumo de azúcares y sal[/sta_anchor]

Evita los dulces procesados altos en azúcares, como las gaseosas. Al igual que los alimentos con excesivas cantidades de sodio, como las típicas salsas de los supermercados. Para saber exactamente qué estás consumiendo, revisa siempre la etiqueta nutricional.

[sta_anchor id=»link4″]Aumenta el consumo de fibra[/sta_anchor]

Tus platos de comida deben tener más vegetales frescos y verdes, son los más ricos en fibras. Además, también procura consumir frutas siempre que sea posible, equilibrando el consumo porque muchas de ellas son altas en fructosa. Y por supuesto, los cereales no pueden faltar. Todos estos alimentos son ricos en fibra, lo que promueve una adecuada digestión, entre muchos beneficios más.

[sta_anchor id=»link5″]Evita el consumo excesivo de comidas rápidas[/sta_anchor]

No se trata de que los elimines por completo de tu dieta, pero sí que reduzcas el consumo excesivo. Una vez a la semana puedes darte el gusto de comerte una hamburguesa, pero no todos los días ni de forma recurrente.

Como ves, es un proceso que poco a poco puedes ir integrando a tu rutina diaria. Comer sano no debe ser ni un sacrificio ni una obligación, debes y puedes aprender a disfrutarlo.

- Publicidad -
¿Le resultó útil este artículo?
Artículos Relacionados