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El cáncer óseo es una enfermedad rara porque representa sólo el 1% de todos los tipos de cáncer. Afecta a niños y adultos y puede desarrollarse en cualquier hueso del cuerpo. Sin embargo, los huesos largos de brazos y piernas son los más afectados.
Tipos de cáncer de hueso
- Osteosarcoma comienza en la células óseas afectando brazos, piernas y pelvis
- Condrosarcoma se manifiesta en el cartílago y también afecta brazos, piernas y pelvis
- Sarcoma de Ewing afecta la pared torácica
- Histiocitoma comienza en los tejidos blandos
- Fibrosarcoma Cordoma
- Tumores óseos de células gigantes
- Cordoma que generalmente se encuentra en la columna vertebral
Síntomas del cáncer óseo
El síntoma que se presenta normalmente es el dolor en los huesos. Sin embargo, otras reacciones del cuerpo ante este mal son:
- Fracturas por debilidad ósea
- Cansancio
- Hinchazón en área afectada
- Anemia
- Fiebre
- Pérdida de peso
Causas
A pesar del desconocimiento de las causas de la enfermedad, hay algunas enfermedades hereditarias asociadas al cáncer de hueso que podemos mencionar:
- Exostosis múltiple relacionada con la condrosarcoma
- Síndrome de Rothmund-Thomson que causa erupción, escasez de vellos y malformación en los huesos
- Retinoblastoma afecta la retina y ataca tejidos blandos y huesos
- Síndrome de Li-fraumeni, un trastorno genético que generalmente causa cáncer de huesos
- Enfermedad ósea de Paget afecta a las personas mayores causando osteosarcoma
Existen otros factores de riesgo que pueden desarrollar la enfermedad, tales como:
- Radioterapia si se administró durante la infancia
- Exposición a materiales radioactivos
- Trasplante de médula ósea
Diagnóstico de la enfermedad
Los métodos utilizados para diagnosticar la enfermedad son muchos. Su médico debe aplicar exámenes como pruebas de imagenología, radiografías, resonancia magnética, tomografía, gammagrafía que permite observar la actividad metabólica del hueso y la biopsia de hueso que proporciona la prueba definitiva del cáncer. Sin embargo, esta última prueba debe ser realizada por un cirujano experimentado, ya que existe un riesgo de la propagación de la enfermedad desde el núcleo de la misma.
Tratamientos recomendados
Para tratar este cáncer es indispensable la presencia de especialistas en la materia que se encarguen de llevar a cabo procesos como:
- Cirugía: el método más utilizado consiste en extraer un pequeño margen de tejido óseo canceroso y una pequeña porción del tejido sano que lo rodea. Se debe aplicar radiación y quimio para eliminar células restantes.
- Radioterapia: se usa para reducir tamaño de los tumores, eliminar células cancerosas y reducir el dolor.
- Quimioterapia: ataca las células de replicación rápida, pero tiene efectos secundarios significativos.
Si presentas algún síntoma que te haga sospechar de un cáncer de hueso, no dudes en acudir a tu médico para que realice las pruebas pertinentes.