En los inviernos fríos y húmedos, los pulmones y los senos nasales son el hogar de muchas bacterias y virus, que se pueden encontrar en la mucosa respiratoria, en las enfermedades pulmonares y en el dosel al mismo tiempo. Vamos a ver qué aceites esenciales ayudan a limpiar estos depósitos de moco.
Aceites esenciales para la limpieza respiratoria
En primer lugar, es útil para desinfectar los tubos bronquiales y los senos nasales. Normalmente, la infección respiratoria comienza en los senos y la cavidad nasal. Será útil inhalar aceites esenciales purificantes como el eucalipto radiata o el eucalipto glóbulo. En los niños, se prefiere el eucalipto mencionado en primer lugar, ya que es más suave. Esta inhalación puede hacerse poniendo una gota de aceite esencial puro de eucalipto debajo de cada fosa nasal, o poniendo un poco de este aceite esencial en un difusor de aromas.
Aceites esenciales inmunoestimulantes respiratorios
También se administran inmunoestimulantes como el ravintsara o el árbol de té. El primero mencionado es también un excelente antiviral, por lo que se prefiere en caso de que el problema respiratorio sea viral (angina viral por ejemplo) o cuando el problema respiratorio se acompaña de afecciones similares a la gripe. El árbol de té es un aceite esencial antibacteriano, útil en caso de sinusitis o trastornos de tipo bronquitis. Estos dos aceites esenciales tienen la ventaja de no ser agresivos y pueden utilizarse incluso en niños menores de seis años.
Caldo blanco y de avellana para complementar
Estos aceites esenciales pueden tomarse en sinergia con plantas de acción pectoral o reguladora de las mucosas de los bronquios y los senos paranasales. Citamos inmediatamente una planta notable, el caldo blanco, que entra en la composición de muchos complejos de plantas respiratorias. Esta planta tiene propiedades expectorantes porque activa los cilios de las células de las membranas mucosas bronquiales. Los azotes en cuestión renuevan las membranas mucosas y permiten la evacuación de los microcontaminantes que obstruyen los tubos bronquiales.
El avellano en la gemoterapia es la otra planta que se aconseja. Este brote favorece el tono de los pulmones incluso en caso de insuficiencia pulmonar. Se puede recomendar incluso en personas que han tenido una enfermedad infecciosa pulmonar grave, con secuelas como el asma crónica o la insuficiencia pulmonar con tendencia a la obstrucción.
No te olvides de la prevención
Es posible que no tenga que esperar a tener una infección pulmonar para recibir tratamiento. En los tratamientos preventivos, el ravintsara será muy interesante porque estimula el sistema inmunológico y ayuda a evitar mejor la instalación de agentes infecciosos. Como complemento, puedes tomar una tableta de acerola, rica en vitamina C, por la mañana con el estómago vacío.
Fuente: Alain Tardif
Naturópata, Presidente de la Academia Europea de Medicina Natural, creador de productos de plantas y hongos y autor de muchos libros
